Artes escénicas

Proyecto Vidriera: escenas teatrales para mirar en una vereda de Palermo

Hasta el 31 de diciembre desde la vereda de Honduras 3714, la actriz Inés Efrón presenta Proyecto vidriera, un ciclo que marca su primera experiencia como directora frente a un importante conjunto de artistas, de todas las disciplinas, que crean escenas y performances en la vidriera de un local que, sorprendentemente, no vende nada. Martín […]

Hasta el 31 de diciembre desde la vereda de Honduras 3714, la actriz Inés Efrón presenta Proyecto vidriera, un ciclo que marca su primera experiencia como directora frente a un importante conjunto de artistas, de todas las disciplinas, que crean escenas y performances en la vidriera de un local que, sorprendentemente, no vende nada.

Martín Piroyanski, Dani Umpi,  Lules, Violeta Urtizberea, Santiago Orti, y Nahuel Perez Biscayart  son solo algunos de los nombres que se atrevieron a ponerle el cuerpo a esta desmesurada experiencia escénica ideada por Efrón, que se desarrolla en la vidriera de un típico local de Palermo, detrás de la que podremos encontrarnos a la propia Inés acampando, al artista visual Santiago Orti analizando materia fecal, o a Martín Pensotti catando junto a un coro.

“Necesitaba tener un proyecto personal y generarlo, poner siempre el cuerpo en proyectos de otros comenzó a no cuajar en algo de mi deseo, le cuenta Efrón a Palabras, sobre el origen de esta iniciativa, que reconoce marca un antes y un después en su carrera.

¿Y cómo fue que esa necesidad se materializó en una vidriera?

Siempre tuve la fantasía de tener un local, desde niña creo, y las vidrieras me fascinan, soy una gran miradora de vidrieras, porque me activan un mirar nada pasivo, muy conectado con el deseo. Además, muchas veces, frente a las de los bares o los restaurantes, por ejemplo, siento que son pequeñas pantallas que te conectan con hechos y situaciones que en el fondo son muy teatrales. Entonces entre la necesidad y la fascinación un día desperté y el proyecto surgió claro.

Luego lo presenté frente a Mecenazgo y así obtuve el dinero para concretar este proyecto donde participan muchos amigos muy talentosos, y algunos artistas que me interesan mucho aunque no conocía tanto personalmente como Ariel Farace, Demian Velazco, o Matthieu Perpoint.

¿Ya casi en la mitad del ciclo qué es lo que más te sorprendió de la reacción del público frente a este dispositivo?

Siempre me interesó indagar en aquello que se genera cuando la ficción se inserta en lo cotidiano, en los que pasa cuando en medio de la rutina diaria la ficción te sorprende, y una de las cosas que fui viendo es que la sorpresa y el desconcierto inicial que ese encuentro genera, muchas veces termina en una suerte de permiso para ponernos más inocentes.

La apuesta de Santiago Orti, fue muy interesante en ese sentido porque él armó un mundo científico de fantasía muy bien hecho, y allí se puso a analizar materia fecal, y la mayoría de los que miraban se preguntaban todo el tiempo si eso era o no real. Después, hay de todo, niños fascinados, gente que no para de reírse y otra que intenta racionalizar cada detalle.

¿Y cómo fue para vos ingresar a la vidriera?

Como actriz el primer día que acampé en la vidriera me dije: tranquila, no van a pasar grandes cosas, hay que relajar, e inmediatamente empecé a preguntarme ¿finalmente, qué es que pasen cosas? A mí me gusta lo sutil, me gusta el detalle, pero entendí que uno puedo ver a una chica que se va de camping sola, una hora o 5 minutos, porque en definitiva es un hecho vivo, y en eso está la clave.

Luego, y centralmente, creo que vidriera, que esta posibilidad de realizar un proyecto propio abrió una puerta que difícilmente se cierre,  porque esta mezcla de dirección y actuación que implica es algo que me encanta muchísimo hacer.

Vidriera se presentará hasta el 29 de diciembre en Honduras 3714 de forma libre y gratuita. En la cuenta de Instagram @esunavidriera se va anunciando la programación.