Entrevistas

Se lanzó Living Inside, el último trabajo discográfico de Sebastián Volco

Entre los múltiples lanzamientos discográficos del mes de agosto se destaca Living Inside, el último trabajo de Sebastián Volco, grabado en Argentina, días antes del cierre de fronteras y el comienzo de la cuarentena. Nacido en Buenos Aires, pero residente en París, Volco, creador de la Orquesta Metafísica junto a Sebastián Rosenfeldt, es reconocido por […]

Entre los múltiples lanzamientos discográficos del mes de agosto se destaca Living Inside, el último trabajo de Sebastián Volco, grabado en Argentina, días antes del cierre de fronteras y el comienzo de la cuarentena.

Nacido en Buenos Aires, pero residente en París, Volco, creador de la Orquesta Metafísica junto a Sebastián Rosenfeldt, es reconocido por su condición de multiinstrumentista, una virtud de la  que en Living Inside se despoja para concentrarse solo en el piano. Caracterizado como un álbum premonitorio, el concepto minimalista e hipnótico de este trabajo remite a la música clásica romántica e impresionista, pero interpretada por un rockero con aires tangueros y una estética psicodélica omnipresente.

Para indagar en algunos detalles más de esta obra, y en sus impresiones  sobre cómo transitan este particular momento los artistas independientes en Francia, Palabras dialogó con Sebastián Volco desde París.

¿Cómo surge Living Inside y por qué lo caracterizás como un álbum premonitorio? 

Comencé a grabar Living Inside al otro día del concierto que realicé en Hasta Trilce en Febrero de este año. Me encerré en Casa Frida Studio en Escobar, me senté al piano y salí unos días después con el álbum terminado, junto a un montón de música más. Y si bien era un trabajo que tenía proyectado hace tiempo, muchos me han dicho que por el momento en que finalmente se dio fue casi premonitorio del mundo que estaba por llegar, por esto del músico tocando solo, ya que el disco está construido en un 99% de piano con algunas pinceladas electrónicas en la post-producción. 

Igualmente, la decisión de hacer este álbum fue previa a la Pandemia, y nunca me imaginé que todo se iba a cerrar así, la imagen del músico despojada de todo, y tratando de encontrar un vestido nuevo para su voz, puede haber tenido algo de premonitorio, pero realmente la idea que animó esta propuesta fue  poder hacer cosas de forma más independiente, y animarme a algo más introspectivo, parar la pelota y exponer mi corazón sin artificios.

¿En esa exposición fue que tus influencias clásicas se hicieron mas evidentes? 

Al ser un disco tan despojado tal vez es más fácil ver algunas esencias que están muy presentes siempre, pero más enmascaradas. Living es mi disco 16, y si bien creo que está claro que detrás de todo hay un mismo músico, este trabajo me parece más accesible, con capacidad de llegar a un público más amplio, y hasta te diría que creo que hoy es un disco útil, que  puede servir para acompañarnos en estos  momentos sin molestar, porque la música que yo hago en general no va en esta línea, tiene más disonancias, es un poco más pesada, y creo que aquí hay una propuesta más suave, casi una invitación a desconectarnos de la red y conectarnos con el universo interior.

¿Cómo fue el pasaje desde el estudio hacia este nuevo escenario que impuso la pandemia? 

Al igual que todo el mundo un recorrido muy como en una especie de nebulosa, con una sensación de estar de paso, que en mi caso se intensificó porque mi mujer consiguió un trabajo fuera de París, que nos salvó durante estos meses, pero nos obligó a mudarnos. Así que transité unos meses extraños, trabajando en algunos proyectos, pero con una sensación permanente de que todo está muy frágil, algo que continúa pese al relajamiento de la cuarentena que actualmente estamos viviendo aquí.

Como seguramente muchos saben, en Francia hay cierta red para los artistas que están dentro del sistema, pero eso no implica que no haya también una doble vara, por ejemplo, ahora salís a la calle y tenés todos los bares abiertos y la gente reunida en las plazas,  pero sí querés hacer un concierto de jazz, no te digo un mega concierto, sino algo acotado, no se puede. Entonces, aquí como en todo el mundo, hay una doble vara, el futuro no está muy claro, y para los músicos, específicamente, las perspectivas del vivo no parecen ciertas al menos por este año.

¿Y frente a ese panorama qué?

Yo como músico me estoy reinventando, aunque adaptarse no es sencillo ni tampoco  demasiado posible o útil para los músicos que trabajamos en una modalidad performática. Por lo pronto, mientras acompaño el lanzamiento de Living Inside estoy trabajando en un solo set, ya no únicamente con el piano, sino tocando todo lo que pueda, en un formato pequeño, preparándome para cuando esto se reanude, ya que por una cuestión logística y económica hoy es imposible proyectar formatos muy grandes de gente moviéndose.

¿Más allá de tu trabajo cuáles son tus expectativas sobre lo que dejará esta experiencia? 

No creo que las sociedades cambien para bien luego de estas desgracias, sí creo que estas crisis delatan lo frágil que es la humanidad, como si el barbijo nos quitase la máscara.  

Creo que hoy todos estamos viendo cómo hacer y qué hacer con la tecnología, con la vida, y con el miedo que nos empieza a generar el otro, cuando todos pueden ser potenciales transmisores de un virus. Entonces, frente a este panorama, si ya veníamos demasiado individualistas, la salida no me genera demasiadas expectativas.

Más info sobre living Inside:    www.sebastianvolco.com     —- You Tube