Arquitectura

Premio Azcuy: una iniciativa que busca estimular la puesta en valor y sustentación del arte argentino

Esta semana se conoció la nómina de finalistas de la primera edición del Premio Azcuy, organizado por la compañía integral de Real Estate en asociación con el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, para reconocer, difundir y fomentar la producción artística nacional. Carolina Raquel Antich, Elba Bairon, Diego Bianchi, Miguel Harte, Martín Legón, Florencia […]

Esta semana se conoció la nómina de finalistas de la primera edición del Premio Azcuy, organizado por la compañía integral de Real Estate en asociación con el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, para reconocer, difundir y fomentar la producción artística nacional.

Carolina Raquel Antich, Elba Bairon, Diego Bianchi, Miguel Harte, Martín Legón, Florencia Sadir y Cristina Schiavi fueron los artistas seleccionados, entre más de 300 participantes, para ingresar a la segunda fase del concurso que contempla la planificación y desarrollo de los anteproyectos en vista de la selección final, que consagrará al ganador que recibirá 750 mil pesos, y materializará su obra para ser emplazada en el edificio DONNA Terra, del barrio de Caballito, que se inaugurará en marzo de 2020.

El jurado responsable de la selección fue conformado por Victoria Noorthoorn, directora del Museo de Arte Moderno; Javier Villa y Carla Barbero, curadores del museo; Gerardo Azcuy, socio fundador y director general de Estudio Azcuy; Mónica Girón, artista; Carlos Huffmann, artista y director del Departamento de Arte de la Universidad Di Tella; y a nivel internacional, contó con la participación de Mélanie Bouteloup, directora de Bétonsalon – Centre d’art et de recherche & Villa Vassilieff, de París, Francia.

Con 25 años de trayectoria, el estudio fundado y liderado por el arquitecto Gerardo Azcuy se caracteriza por crea proyectos que combinan inteligencia, elegancia y sustentabilidad. Su sello son los smart projects, obras que integran tecnológica, uso racional de recursos y altos estándares de calidad, una línea dentro de la que  actualmente está  desarrollando la serie DONNA, integrada por cuatro edificios, que serán los emplazamientos de las obras finalistas del Premio Azcuy de las artes.

Para conocer algunos detalles más de esta iniciativa que busca estimular la puesta en valor y sustentación del arte argentino Palabras dialogó con el arquitecto Gerardo Azcuy

¿Cómo surge la iniciativa de lanzar el Premio Azcuy de las artes?

Como compañía integral de real estate, desde nuestros orígenes, el diseño y la sustentabilidad constituyen dos de los ejes fundamentales de todas nuestras obras y, en esa línea, hace años estamos interesados en encontrar puentes para integrar diferentes expresiones artísticas a nuestros proyectos.

Lo cierto es que sistematizar el vínculo con los artistas y el universo del arte en general no es una tarea sencilla, y requiere conocimiento y dedicación, desde esa visión buscando ideas para generar puentes fue que surgió la posibilidad de generar esta iniciativa conjunta con el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, una entidad pública con una trayectoria y un equipo de trabajo de excelencia.

Tuvimos muchas reuniones con Victoria Noorthoorn, la directora del Moderno y su equipo de asesores y así surgió el proyecto de lanzar este concurso de ideas, una convocatoria abierta y de alcance nacional dirigida a artistas individuales y/o colectivos argentinos, emergentes o consagrados, cuyo objetivo es reconocer, difundir y fomentar la producción artística nacional, estimulando la puesta en valor del arte argentino.

¿Cuál fue el resultado inicial de aquel primer llamado?

La convocatoria desbordó realmente todas nuestras expectativas ya que recibimos más de 300 trabajos y miles de consultas. En el proceso, además, realizamos una serie de visitas guiadas, para que los interesados puedan conocer el edificio donde iba a emplazarse la obra y, nuevamente, para nuestra sorpresa tuvimos que organizar cuatro jornadas con más de 100 personas participando en cada oportunidad.

Hicimos asados de obra e invitamos a los artistas a conocer integralmente el espacio, ya que el proyecto comprende toda la planta baja del edificio, y aunque no era una condición, nos parecía interesante que puedan proyectar obras integradas, y afortunadamente varias lo fueron.

¿Qué fue lo que más los sorprendió de esa etapa?

Además de la creatividad y profesionalismo de la totalidad de los participantes, poder ver la variedad y diversidad de ideas que surgieron en torno a un mismo espacio fue algo maravilloso, porque se presentaron iniciativas de todo tipo, desde proyectos para fabricar compost para hacer tratamiento de la basura y filtrado de agua, que no son las cosas en que uno piensa en primera instancia al hablar de arte, y son increíbles, hasta trabajos más clásicos, como esculturas en piedra, o investigaciones en aluminio fundido muy interesantes.

¿Cómo continúa el proceso a partir de estos siete finalistas?     

A fines de noviembre tenemos la segunda presentación y la elección de la obra finalista y en vistas a ese momento, ahora estamos en pleno proceso de desarrollo de los anteproyectos.

Una vez seleccionada la obra ganadora se realizará la construcción final que se va a inaugurar junto con el edificio en marzo de 2020, y en ese mismo acto planeamos anunciar las bases de la segunda edición del Premio, que va a comprender dos edificios, y queremos esté acompañada por otra serie de iniciativas para ampliar nuestra relación con los artistas más allá del concurso, y también con la comunidad barrial.

¿Qué nos podés adelantar en torno a este último punto? 

En principio la obra va a ser propiedad del consorcio, porque va a ser una obra site especific, y no habrá posibilidades de trasladarla, pero estamos interesados en establecer una serie de recorridos, o visitas abiertas a toda la comunidad para que puedan conocerla, algo que además dentro de cuatro o cinco años, cuando haya unos diez edificios en la zona, cada uno con sus obras, nos permitirá desarrollar recorridos amplios y muy interesantes.

¿Junto a la posibilidad de establecer y afianzar el vínculo con los artistas qué es lo que más rescatás de esta alianza con el Moderno?  

Además del vínculo y todo lo que aprendemos cotidianamente un punto importante de la alianza con el museo es la posibilidad que nos abrió para acercar a toda la comunidad compradora de departamentos y la comunidad artística.

Ya estamos realizando una serie de visitas de clientes al Museo, y explorando otras ideas para seguir acercando a los consumidores finales, compradores de departamentos e inversores, al mundo del arte que es un vínculo muy interesante, realmente nos interesa promover.