En un contexto marcado por las restricciones producto de la pandemia, y la falta de políticas públicas para el sector de la cultura a nivel nacional, Micaela Saconi, gestora cultural con una gran experiencia en el área, desarrollada en espacios como el Museo de Arte Contemporáneo de la Provincia de Buenos Aires (Museo MAR) , que la tuvo como directora entre 2016 y 2019, o el taller “Gestión y Producción Artística”, para el Centro Cultural San Martín (CABA) y para el Departamento de Capacitación de la Universidad de Buenos Aires, que actualmente está a su cargo, asumió hace poco más de un mes como titular de la Dirección de Cultura del Municipio de Tandil.
Para conocer los objetivos de su nuevo desafío, y su visión sobre cómo dinamizar la gestión pública de la cultura desde un gobierno local Palabras dialogó con Saconi.
¿Por qué decidiste aceptar en un contexto sumamente extraordinario la titularidad de la cartera de cultura de Tandil?
Hace más de diez años que vivo en Tandil y a pesar de que estuve como Directora del Museo MAR, que se encuentra en Mar del Plata, seguí viviendo en Tandil e iba y venía y conozco bastante a la comunidad artística de Tandil.
En ese sentido me pareció un desafío enorme pero interesante, porque además ingresé en una situación especial, ya aquí había una gestión en funcionamiento, que sufrió el fallecimiento por COVID del anterior titular, Miguel Rouaux, y en un contexto general complicado, marcado por la Pandemia, en el que, de hecho, no se habían podido llevar a cabo muchas de las actividades que se habían programado para 2020.
En ese sentido, la Dirección ya estaba pensando en cambiar la concepción tradicional de su trabajo, algo que entiendo es una oportunidad muy interesante, porque si bien hace menos de un mes que asumí, ya estamos pensando nuevas miradas para muchos de los programas que existían.
¿Nos podes adelantar algo en esa línea?
En mayo, por ejemplo, cada año se celebra aquí en Tandil el mayo teatral, en 2020 hubiera sido la 20º edición de ese festival, pero por las restricciones sanitarias no se pudo realizar.
Ahora estamos trabajando para hacerlo, y pensando nuevos formatos para concretarlo, explorando además de las posibilidades de eventos presenciales, la puesta en marcha de modalidades virtuales para las capacitaciones, pero también para la proyección de piezas audiovisuales realizadas con lenguaje teatral.
Obviamente, todo esto implica desarrollar una nueva plataforma de cultura, que pueda contener todo ese material, que ya estamos desarrollando, y nos tiene sumamente entusiasmados.
Un área donde venís con mucha experiencia
Muy buena experiencia diría porque, entre otras cosas, desde 2015 trabajo en el Festival de Teatro Vicente López en Escena , para el Municipio de Vicente López, que siempre fue presencial, y este año lo hicimos íntegramente virtual y funcionó muy bien, así que un poco mi idea es fortalecer esas experiencias previas y plasmarlas en esta gestión.
¿Qué es Tandil en términos culturales?
Tandil tiene una vida cultural muy importante, sobre todo porque es sede de la Carrera de artes de la Universidad del Centro. Esto implica, que tiene una vida joven muy activa y mucho desarrollo alrededor del artes, lo audiovisual, etc. Hay varios teatros, cines, museos. Realmente es una ciudad con mucho movimiento cultural, que se alimenta también con el turismo, porque hay un gran movimiento de turismo interno, sobre todo los fines de semana, que también fortalece esa dinámica.
En esa línea, mi apuesta personal es abrir, potenciar, porque muchas veces existe un movimiento un poco endógeno por falta de políticas de apertura, y yo creo que uno de los desafíos del estado local es generar políticas que permitan visibilizar esa inmensa actividad cultural y proyectarla a un nivel regional y nacional.
¿La virtualidad es una herramienta interesante para explorar ese desafío?
Claramente, porque la virtualidad en algún punto horizontaliza el acceso a capacitaciones, a información, a espectáculos, y genera un movimiento que va a continuar, y creo que es una oportunidad, siempre que entendamos que hay un inmenso desafío creativo también, porque no se trata simplemente de trasladar lo presencial a lo virtual.
¿Junto a la premisa de convertir al estado local en promotor cultural, y el desarrollo de nuevas plataformas de cultura, qué marca te gustaría ponerle a tu gestión?
Creo que es importante que entendamos que la cultura es cruce, que ya no se trata de trabajar literatura, sino, por ejemplo, juventud, y en esa línea todas las expresiones de los jóvenes que se dan en la literatura, en la música, etc.
En principio me interesa trabajar juventud, cultura con mirada de género, e infancia, como tres grandes ejes ordenadores, que nos van a posibilitar tomar los proyectos existentes y abordar los nuevos siempre desde miradas transversales.