Entrevistas

Fotografías, la primera muestra individual de Federico Kirschbaum

Hasta el 17 de noviembre en la galería Jorge Mara −La Ruche se presenta Fotografías, la primera exposición individual de Federico Kirschbaum, que invita a través de 30 fotografías en blanco y negro, tomadas en diferentes sitios de Argentina y el mundo, a sumergirnos, de manera casi cinematográfica, en una temporalidad reflexiva y diferente.Para conocer […]

Hasta el 17 de noviembre en la galería Jorge Mara −La Ruche se presenta Fotografías, la primera exposición individual de Federico Kirschbaum, que invita a través de 30 fotografías en blanco y negro, tomadas en diferentes sitios de Argentina y el mundo, a sumergirnos, de manera casi cinematográfica, en una temporalidad reflexiva y diferente.Para conocer la génesis de esta exposición y de las obras, e indagar en la mirada detrás de la cámara Palabras dialogó con Federico Kirschbaum.

¿Cómo nace tu pasión por la fotografía, y la decisión de expresarla a través de herramientas analógicas, siendo un nombre tan ligado al mundo de las tecnologías digitales?

Yo me dedico a la seguridad informática, trabajo con computadoras todo el día, y todo el tiempo, y creo que lo analógico viene, justamente, un poco por ahí, como una posibilidad de desconectarme, de meterme en otro universo, y también de enfrentarme a situaciones no tan previsibles, ya que de esta manera al sacar una foto no podés ver realmente qué es lo que tomaste de manera inmediata, tenés que imaginártelo, y te volvés a sorprender cuando revelás los negativos.

¿Cómo surge la posibilidad de realizar la muestra, y cómo definís el recorrido que propone? 

La muestra es el producto de un gran ida y vuelta con Jorge Mara, que fue el gran motor de la decisión. En cuanto a la propuesta creo que se armó algo así como un recorrido por diferentes momentos y diferentes lugares, casi como una exploración por diferentes cosas que descubrí y me atrajeron, y que, además, redescubrí meses más tarde, porque en general no revelo nada inmediatamente, con lo que surgió todo un juego entre la foto que quería, la que salió, y la que me imaginé.

Son fotos clásicas, pero con muchos detalles, que te invitan a volver a verlas, a descubrir nuevos matices y elementos. Por otra parte, si bien a mí me encantan los colores, siento que tienen mucha información, y que a veces hacen que se pierda la escena, la textura, la expresión, por eso creo que el blanco y negro en estas obras genera un desplazamiento, porque nadie ve en blanco y negro, y aún siendo un clásico, también es un poco más fantasioso.

Finalmente, como yo estudié cine, y muchísimas de mis películas preferidas son en blanco y negro, creo que tambien hay una apuesta a sacar fotos medio de películas, a modo de homenaje.

¿Y cómo entra en esa ecuación de intenciones y deseos la mirada del público?     

Una de las primeras cosas que aprendés al exponer es que vos no sos la obra, y que a las personas le pasan cosas a veces similares, a veces insospechadas, pero siempre diferentes con las obras. Por otra parte, aunque tal vez no se note, como estas fotos tienen cierto nivel de intimidad, para mí fue muy interesante ver que a mis amigos, o a la gente que me conoce, las fotos le generaban cosas muy similares, como si hubiera una unión casi invisible entre nosotros.

Finalmente, si bien estamos en la era de la imagen, y sacamos y consumimos fotos todo el tiempo, creo que lo analógico, el blanco y negro, incitan a reflexionar un poquito y generan cierta fascinación, algo que no solo pasa con las fotos sino también con las cámaras que acompañan la muestra.

Esos instrumentos, que encontré en diferentes lugares: en un baúl, en una casa de antigüedades, que arreglé y con las que tengo un relación no al estilo de los coleccionistas, sino como herramientas de laburo y de experimentación, enganchan mucho a la gente, que se detiene a observarlas tanto como a las obras.

¿Sentís que a partir de aquí se abre todo un nuevo camino?

Realizar esta muestra fue un gran desafío porque implicó mostrar un lado mío que no mucha gente conoce, pero que me divierte; y si bien nunca saqué las fotos pensando en hacer una muestra, si creo que haberla realizado reconfirmó mi decisión de seguir explorando mi mirada, de seguir investigándola, y aventurarme intentando sacar fotos que, finalmente, pueden salir o no.

Federico Kirschbaum / Fotografías se presenta hasta el 17 de noviembreen Galería Jorge Mara, Paraná 1133, de lunes a viernes de 11 a 13.30 y de 15 a 19.30 hs. Sábados de 11 a 13.30hs.